viernes, 31 de mayo de 2013

Calle 13- todas las hojas Son del viento Homenaje a L.A Spinetta

Tópicos barrocos y Renacentistas en “Sobre la red de amor” de Hernando de Acuña

Hernando de Acuña
Sobre la red de amor
Dígame quién lo sabe: ¿cómo es hecha
la red de Amor, que a tanta gente prende?
¿Y cómo, habiendo tanto que la tiende,
no está del tiempo ya rota o deshecha?

¿Y cómo es hecho el arco que Amor flecha,
pues hierro ni valor se le defiende?
¿Y cómo o dónde halla, o quién le vende,
de plomo, plata y oro tanta flecha?

Y si dicen que es niño, ¿cómo viene
a vencer los gigantes? Y si es ciego,
¿cómo toma al tirar cierta la mira?

Y si, como se escribe, siempre tiene
en una mano el arco, en otra el fuego,
¿cómo tiende la red y cómo tira?

Tópicos barrocos y Renacentistas en “Sobre la red de amor” de Hernando de Acuña[1]
Daniela Rodríguez.
Este soneto se compone básicamente de una serie de preguntas retóricas, y menciones sobre las figuras o atributos que se le han atribuido al amor (Cupido, Amor, ceguera, etc.). Como todo poema Renacentista principalmente sabemos que es de influencia petrarquista.
Es bastante interesante ya que los tópicos que encuentro son mínimos, y me parece más bien una sátira del amor.
Pero qué decir sobre la red del amor, cómo se teje según el pensamiento renacentista:
“cada alma particular, enamorada y bella, crea con sus gestos, sus palabras y sus favores una red mágica alrededor del objeto de su amor. Con esta red el enamorado pretende "atar" mágicamente al otro, acercarlo, ser correspondido” [2]
Pero ésta no es la idea que el autor toma en el poema, es decir, esta figura la utiliza de una forma literal, que podría parecernos inclusive fría.
<< Dígame quién lo sabe: ¿cómo es hecha
la red de Amor, que a tanta gente prende?
¿Y cómo, habiendo tanto que la tiende,
no está del tiempo ya rota o deshecha? >>
La red no se puede romper por que no existe dentro de nuestro mundo físico, pero sí dentro del mundo amoroso renacentista, es una figura ideal que para cualquiera queda clara. Pero nuestro autor se burla de esa manera ideal de considerar al amor.
Acuña fue un hombre de armas y de palabras, quizá por esto fuese una persona dura de carácter y me resulte éste un soneto de tono frío, a diferencia de otros poemas de la misma época. Vemos que no sufre por el amor mal correspondido, ni alude a la amada, no es de tema bucólico ni tampoco habla sobre doncellas o flores. Es una burla a la idea del amor Renacentista.
Aunque parece hacer una leve alusión a lo irremediable que es esta enfermedad del amor, justo en dos versos de la segunda estrofa cuando dice:
<<¿Y cómo es hecho el arco que Amor flecha,
pues hierro ni valor se le defiende?>>
Pero reivindica su burla en la misma estrofa:
<<¿Y cómo o dónde halla, o quién le vende,
de plomo, plata y oro tanta flecha?>>
Pero podemos decir algo más sobre estos versos donde hace alusiones a metales duros y valiosos con gamas de colores diferentes, por ejemplo el plomo y la plata son metales que se caracterizan por su color, considerándolo más bien como un gris mate podría significar, en psicología del color: resignación. En realidad no es un color, sino el producto de la mezcla blanco y el negro, simboliza neutralidad, sugiere tristeza y es una fusión de alegrías y penas, del bien y del mal.[3]
El oro en cambio significaría, según la misma teoría:
“En muchas culturas, es el símbolo de la deidad y es el color más luminoso, más cálido, ardiente y expansivo, es el color de la luz del sol. Genera calor, provoca el buen humor y la alegría. Estimula la vista y actúa sobre el sistema nervioso. Está vinculado con la actividad mental y la inspiración creativa ya que despierta el intelecto y actúa como antifatiga.”[4]
Considerando esto podemos decir entonces que Amor flecha con diversos materiales, los cuales escoge al azar, según el material de la flecha ese sería el destino en el amor. Así una flecha de plomo o plata resultaría más azarosa que la de oro.

Y siguen las preguntas retóricas, la sátira al ideal del amor en las últimas dos estrofas siguientes, donde menciona la figura del Cupido, y la ceguera característica que se le ha atribuido.
<<Y si dicen que es niño, ¿cómo viene
a vencer los gigantes? Y si es ciego,
¿cómo toma al tirar cierta la mira?>>
Retomando lo dicho anteriormente sobre lo azaroso de Amor, podríamos responder la pregunta del último verso en esta estrofa. Sí, Amor es ciego y juguetón, y no le importa hacer tiros certeros, sólo se divierte, como cualquier niño.
<< Y si, como se escribe, siempre tiene
en una mano el arco, en otra el fuego,
¿cómo tiende la red y cómo tira?>>
Reitero la idea que mencionaba al principio, nuestro autor toma de forma literal la idea Renacentista del amor
y hace una burla de éste. En la última estrofa podemos encontrar la mención a un referente, el cual no encontré, sobre la figura de Amor con el arco y el fuego en las manos. 







[1] (¿1520? - 1580) Natural de Valladolid. Falleció en Granada. Además de gran poeta, fue un excelente hombre de armas. Combatió en Italia y Alemania. Fue coetáneo y amigo de Gracilazo de la Vega. Entre sus propias obras se destacan la Fábula de Narciso, la Contienda de Ayax y Telamonio y Ulises. Pero es más conocido por sus admirables sonetos, sus églogas y elegías, algunas de ellas dedicadas al Emperador Carlos V.
[2] http://literaturauniversaliesmfernandez.blogspot.com/2009/03/el-amor-en-el-renacimiento.html
[3] http://estocolmo.se/cultura/color_oktub23.htm
[4] http://www.xtec.es/~aromero8/acuarelas/pscologia.htm

Espero curarme de ti - Jaime Sabines

  Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible. Siguiendo las prescripciones de la mora...